El Ministerio de Hacienda va a retrasar un año, hasta 2027, la entrada en vigor del nuevo sistema de verificación de facturas Veri*factu para facilitar la adaptación de las empresas a esta normativa, que obliga a actualizar los programas de facturación para establecer una comunicación directa con la Agencia Tributaria.
El Consejo de Ministros ha aprobado este martes 2 de diciembre un real decreto que incluye esta ampliación del plazo para la digitalización de los procesos de facturación de las empresas en materia fiscal.
Esta ampliación será de un año, lo que implica que el nuevo sistema Verifactu no será obligatorio para profesionales y empresas que tributan en el impuesto de sociedades hasta el 1 de enero de 2027, y hasta el 1 de julio de 2027 para el resto, según ha explicado la portavoz del Gobierno, Pilar López Alegría, en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros.
¿Qué exige exactamente el sistema Veri*factu?
El sistema Verifactu obliga a que los programas de facturación generen un registro de cada factura que sea inalterable, no se pueda eliminar y esté siempre disponible para la Agencia Tributaria. Esto puede hacerse enviando los datos directamente o guardándolos de forma segura para su consulta cuando se requiera.
Esta obligación afecta a todos los profesionales y empresas que utilizan un software de facturación. Quienes emiten facturas de forma manual no se ven afectados.
Con la medida aprobada hoy, la puesta en marcha de estos requisitos, prevista para el 1 de enero de 2026 para las empresas que tributan por el impuesto de sociedades y para el 1 de julio de 2026 para el resto, se aplaza finalmente un año más.
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